
Prevención de la gingivitis con agua ozonizada
Para prevenir y tratar enfermedades como gingivitis, tanto a nivel doméstico como profesional u ontológico cada vez más se utiliza el agua ozonizada hecha con los aparatos de ozono.
Su uso es muy recomendable para mejorar la higiene bucal a la hora de realizar los tres cepillados diarios por ejemplo. En concreto, se recomienda finalizar los cepillados con enjuagues de agua ozonizada para que de esa forma se previene y combate la halitosis, la gingivitis o la periodontitis, entre otras afecciones bucales.
Los expertos aseguran que la limpieza diaria con agua ozonizada no puede provocar irritaciones bucales, lo contrario, ayuda a prevenir cualquier tipo de enfermedad o infección bucal.
Gracias a un suave efecto antibiótico que tiene el ozono pueden utilizarlo personas enfermas, mayores o convalecientes. Pero, siempre es recomendable consultarlo con los especialistas antes de utilizarlo.
El ozono tiene muchas funcionalidades y no ayuda solo a prevenir el gingivitis, sino otros problemas dentales como caries superficiales y, en caso de extracción de dientes u otras intervenciones quirúrgicas bucales el uso del ozono disuelto en agua favorece la cicatrización y, en general, contribuye a la higiene y prevención o profilaxis de distintas enfermedades de la cabidad bucal, ya sean dentales o periodontales.
Por lo tanto, el ozono es el complemento perfecto para mejorar las limpiezas periódicas que nos realizamos en el dentista, previniendo así la acumulación de placa bacteriana en los dientes y encías al tiempo que conseguimos frenar su avance.
Esto no quiere decir que es suficiente para combatir esta enfermedad 100%. Es necesario realizar las limpiezas profesionales, por lo general al menos una vez al año, con el fin de eliminar la placa dentobacteriana. La combinación de una limpieza dental profesional y el lavado diario con agua ozonizada, desinfecta la boca de la mejor forma y minimice la inflamación asociada a la gingivitis.